Seguimos trabajando desde casa, mi intención no es llenaros de ejercicios sino que cada día leáis al menos un versículo de la Biblia.
Voy a poner en el blog cada semana una lección y una actividad, me gustaría que me enviaséis una foto de la actividad a mi correo anamartinmunoz@educa.madrid.org
Puede ser una foto de la actividad o del versículo que hayáis leído esa semana o ese día. Con una foto a la semana que me envíeis será suficiente pero si os anímais a más estaré encantada de recibirlas.
PARÁBOLA DEL TESORO ESCONDIDO
Mateo 13:44
13:44 Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.
Reflexión: Esta
parábola no hace referencia que podemos comprar con nuestro dinero el
reino de Dios, pues lo que realmente significa es que el reino de Dios
es nuestro tesoro más preciado. Jesús dijo: “Y cualquiera que haya
dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o
hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la
vida eterna.(Mateo 19:29)”, esto ubica nuestro corazón, tener puesta la
mirada en las cosas terrenales, nos desvían de las riquezas
celestiales, las cuales son eternas. Cuando cambiamos nuestra mentalidad
con respecto al significado de la vida, ya que la
Escritura dice: “Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del
hombre no consiste en la abundancia de los bienes que
posee.”(Lucas 12:15), las aflicciones y dolores por los afanes de
esta vida comienzan a descansar en aquel que por su gracia y
misericordia reinan en nuestro corazón, al Rey de reyes y Señor de
señores.
Jesús es nuestro tesoro preciado, y si
comenzamos a valorarlo por lo que significa realmente para nuestras
vidas, no estaremos tan preocupados como los que no conocen a Dios. La
verdadera riqueza es Dios.
Actividad.
Un folio lo dividís en dos partes, en la primera tendréis que hacer un dibujo de la parábola y en la segunda parte escribís lo que podemos aprender de esta parábola. Por último hacéis una foto y la envíais a mi correo.
¡Espero veros pronto!